El gran fraude del contenedor amarillo

No es de extrañar que la sociedad civil de sensibilidad ecologista sienta cada vez más lejanas a las instituciones políticas. Vemos una y otra vez que nuestro activismo no tiene repercusión en estas, que las reivindicaciones que hacemos a favor de la naturaleza caen en saco roto aunque hayan dado su palabra, ellos se sacan la foto y lo dan todo por hecho. Algun@s realmente nos sentimos realmente engad@s como ciudadan@s. Hemos aprendido y actuado en la clasificación individual de los residuos, pero no vemos en los representantes políticos ninguna voluntad política o compromiso en buscar soluciones al gran problema que estamos creando con nuestros residuos.

Tenemos que poner encima de la mesa que no basta con tener un sistema adecuado para recoger los residuos, también es muy importante qué se hace con los residuos después de recogerlos, a dónde se llevan y cómo se tratan. Pues no es lo mismo separar, reciclar en una planta especializada, que llevarlo a un vertedero o una incineradora. Con el paso del tiempo ha quedado claro que los responsables políticos no satisfacen las obligaciones que tienen en esta materia, puesto que priorizan los intereses económicos frente al bienestar ecológico.

Un claro ejemplo de ello es la actividad de Ecoembes en el Estado español, a través del Sistema Integrado de Gestión (SIG), con 3, 4 o 5 contenedores diferentes de residuos que gestiona el proceso de recogida, traslado, recogida y reciclaje de residuos además de la vigilancia para que estas operaciones se lleven a cabo, siendo Ecoembes la responsable de los envases y Ecovidrio con los envases de vidrio.

¿QUÉ ES ECOEMBES?

Ecoembes es una empresa privada creada entre 12.000 empresas productoras de envases. Estas empresas por ley están obligadas a gestionar y reciclar los envases que producen, y para ello crearon la empresa Ecoembes responsable de gestionar el 100% de los envases.

Teóricamente es una empresa sin ánimo de lucro, pero eso es muy difícil de entender cuando ha conseguido multiplicar por cinco sus ingresos y por un ejemplo en el año 2018 fue de 578 millones, ese dinero lo aportan esas 12.000 empresas y cada una paga en función de los envases que produce.

El gran problema en la gestión de este residuo es que Ecoembes NO recicla el envase en sí, sino que recicla en función del tipo de envase, no recicla todos los envases que se producen, sólo los que son de sus socios suyos y por eso pagan la tasa. Para ello colocan a todos los envases un logo de referencia, conocido como «punto Verde» (haciendo un círculo con dos flechas en forma de otro círculo). Algunos le llaman «economía circular» porque las empresas dicen que sus envases serán reciclados; no le dan importancia si son contaminantes o si son de un sólo uso.

No hay transparencia, la falta de información es enorme. Ecoembes reconoce que entre los envases con Punto Verde el 22% no recicla. Sabiendo esto, ¿qué porcentaje de los que no tienen logo no recicla? aunque sean rentables, ¿por qué toneladas y toneladas de envases acaban en un vertedero o incineradora? ¿Por qué, los datos no son más transparentes? ¿Por qué en las instalaciones de clasificación de residuos no se llevan todos los envases para reciclar?

LA LEY QUE NO SE CUMPLE

La ley establece que Ecoembes debe hacerse cargo del 100% de los envases. Los datos son claros tal y como ha reflejado el informe «Ecoembes miente» de Julio Barea Luchena, publicado por Greenpeace el 21 de octubre de 2020, la cifra no llega ni al 25%. Ecoembes dice que recicla el 78% por lo tanto alguien miente y nos corresponde al movimiento ecologista exigir tanto a las empresas como a las instituciones públicas (que en este caso van de la mano) que los datos sean públicos y transparentes.

Nos gustaría saber cómo hace las cuentas Ecoembes para decir que los porcentajes de reciclaje son del 78%. Tenemos alguna sospecha pero ... Hay que decir claro que las cifras no son reales, pero intentaremos aclararlas. Supongamos que las empresas producen 2.000.000 de toneladas de envases (sólo los que tienen logo) por lo que si Ecoembes recoge 1.500.000 eso significa que contabilizará el 75% pero al mismo tiempo hay algunos puntos que son oscuros:

* Los datos de las empresas no se conocen, por lo que se puede decir que es un secreto, ¿porqué no son públicos, tanto hay que ocultar?

* En estas 2.000.000 toneladas no están incluidos los que no tienen logo, por lo que estos datos son incompletos, por lo tanto los porcentajes son falsos.

* Que estas toneladas sean recogidas no son sinónimo de que sean recicladas, al ser evidente que muchas de ellas acaban en vertederos, en incineradoras.

* Para terminar con este punto hay que señalar que los envases que se abandonan en las calles, jardines, ríos etc. lo acaban pagando los ayuntamientos (la ciudadanía) porque lo hacen los servicios municipales de limpieza.

Por otro lado, no se puede decir que la ciudadanía juega “limpio” con sus residuos, pues hay que reconocer que en el contenedor amarillo se echan cosas que no deberían de ir ahí, como plásticos que no son envases, juguetes, poliespán, incluso hasta botes con materiales peligrosos y/o muy contaminantes, disolventes, pinturas etc.

Al mismo tiempo hay que subrayar que el propio Ministerio de Transición Ecológica está fracasando cuando dice que el 44% de los plásticos termina en vertederos. Es inaceptable que por ejemplo en Madrid el 85% de los envases se tiren al contenedor gris.

Aquí en Euskadi también hemos tenido/tenemos nuestras «estrellas» por ejemplo, cuando el señor Iñaki Azkuna decía: «Ciudadano, no se preocupe por sus residuos, nosotros nos ocuparemos de ellos» y nosotr@as puntualizamos: llevándolos a vertederos o incineradoras, puesto que es más que evidente que tanto el PNV como el PSOE apuestan claramente por el negocio de la incineración.

TETRA BRIK

Con este recipiente tenemos un grave problema, porque está asumido socialmente por su comodidad, porque es cómodo en su utilización, en su transporte etc. pero en su reciclaje aparecen todos los problemas, ha habido empresas que lo han intentado pero no lo han conseguido.

Actualmente Ecoembes solo recicla el 21% de estos envases. Surgió como alternativa al vidrio, tras gastar millones de euros en campañas de marketing, bajo el lema “basura cero” muchos  ciudadan@s piensan que es ecológicamente sostenible, cuando es totalmente lo contrario. Habría que apostar por la retirada inmediata del mercado, al menos mientras se fabrique como y con los materiales que se hacen hoy día; el 72% es celulosa, el 24% polietileno plástico y el 4% aluminio. Su fabricación está echa a capas con “polímeros” de plásticos, -pequeñas moléculas de plástico que se obtienen del petróleo crudo.-

¿QUÉ PODEMOS HACER EN LA ACTUALIDAD?

Habrá que reconocer que todo lo que hacemos localmente, y tal como está el grado de contaminación por causa de los plásticos demuestra claramente que afecta globalmente, nuestros plásticos llegan a todas las partes del mundo incluso creando islas artificiales, estos plásticos están siendo ingeridos por animales, peces etc. que luego son nuestra comida, y es sabido que el ser humano estamos ingiriendo micro-partículas de plásticos.

MENOS MARKETING Y MÁS ACCIÓN

Socialmente es necesario y justo poner en el horizonte un programa ecologista, es necesario poner sobre la mesa unas reivindicaciones fundamentales y exigir a las instituciones públicas que se cumplan. La transición ecológica es necesaria, el planeta no puede esperar indefinidamente y el área de los residuos plásticos es uno de los pilares principales:

* Hay que prohibir la producción de plástico de un solo uso desde ya!

* Todos los envases deberían de ser reciclables, reutilizables y/o retornable.

* El proyecto de Ley de Envases que prepara el Gobierno de España es poco ambicioso si no se soluciona el problema del envasado y del embalaje, ¿qué clase de ley puede ser esa que no aporta ninguna alternativa al problema de los envases? Cuando compramos un producto no tenemos porqué llevar a casas otros productos como plásticos por doquier, poliestireno etc.

* El problema de los envases tiene una solución factible, el Sistema de Depósito, Devolución y Retorno (SDDR) que más adelante hablaremos de el.

* Las leyes no cubren todas las lagunas, tienen sus propias lagunas, por lo que es imprescindible controlar de manera PÚBLICA y democrática la cantidad de plástico que llega a los vertederos.

* Es necesario atajar y denunciar el almacenamiento de plástico en locales de empresas subcontratadas por Ecoembes y que no están habilitados para ello.

* Hay que recordar la devolución por parte de Malasia de 20 contenedores llenos de plásticos y de envases. Por otro lado investigar los más de 300 incendios ocurridos en supuestas instalaciones de reciclaje en los últimos años. Acabar con la sub-financiación de estas instalaciones por el bien de las condiciones ambientales. Reivindicando unas condiciones laborales de seguridad y DIGNAS para l@s trabajadores.

* Lo ocurrido en el vertedero de Zaldibar donde los trabajadores Joaquín Beltrán y Alberto Sololuze resultaron víctimas mortales del negocio corrupto entre instituciones públicas y empresas privadas no se debe repetir. Es inaceptable la gestión que hubo en este vertedero donde unos echaban lo que y cuanto querían y otros miraban hacía otro lado mientras seguimos exigiendo responsabilidades políticas y judiciales.

ALTERNATIVAS

Desde hace décadas en el movimiento ecologista llevamos reivindicando tres pilares que son esenciales en el tema de los residuos, las conocidas como las tres Rs: Reducción, Reutilización y Reciclaje.

Mientras l@s polític@s deciden que hacer con esa reivindicación, hay un sistema que se ha podido llevar a la práctica, el sistema SDDR (siglas en castellano de Sistema de Depósito, Devolución y Retorno; (de aquí en adelante “Sistema Retorna”).

¿QUÉ ES EL SISTEMA RETORNA?

Es una iniciativa integrada por diferentes grupos sociales, ecologistas y sindicatos, entre los ecologistas estamos; Greenpeace, Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción y Rezero, (Residuo Cero), a nivel europeo está Zero Waste Europe (Residuo Cero de Europa) y en Hegoalde Ekologistak Martxan, y Zero Zabor. El objetivo principal es el residuo cero que en el caso de los envases y plásticos es posible.

¿EN QUÉ CONSISTE EL SISTEMA RETORNA?

Para decirlo de un modo sencillo sería; TODOS los productores y envasadores etc. pagarían una tasa ecológica a la empresa PÚBLICA responsable de la recogida y reciclaje en base a los envases que producen. En este sistema tengan el logo del punto verde o no lo tengan, TODOS los envases serían tratados por igual.

TODOS los comerciantes (pequeños y grandes) compran sus productos más los envases, los consumidores a la hora de la compra pagamos el producto y el envase, pero cuando devolvemos el envase nos devuelven el precio del mismo.

La empresa pública responsable de la recogida de los envases pagaría al comerciante todos los envases recogidos y si l@ consumidores no devolvemos el envase ese dinero se queda en el “camino” y ayudaría a financiar el sistema y la gestión.

La devolución puede ser directa con el comerciante o indirecta en una máquina donde se meten los envases y las máquinas devolverían el importe. De esta forma el ciclo se cierra, NO generamos residuos, las empresas podrían reutilizar ese mismo envase y lo que en su momento era un residuo se ha convertido en un recurso. De este modo desaparecería una empresa que se enriquece gracias a nuestros residuos, el porcentaje de reciclaje sin duda será mucho más alto y nuestros residuos dejarán de ser basura contaminante.

Hay que reconocer que este sistema no es algo recién inventado, en la década de los 70 ya lo hacíamos, antes de que surgiera el boom del consumo y antes que el lobby de los productores de envases apostaran por el envase de un solo uso, o la práctica de usar y tirar.

El Sistema Retorna en algunos países no solo está implantado sino que en algunos tienen un gran éxito como; en Alemania, Holanda, Noruega, en los países escandinavos, en algunas ciudades y estados de USA. En Portugal a partir del 1 de enero del 2022 la ciudadanía podrá devolver latas, vidrio, envases de plástico gracias a este sistema. Está claro que en este tema “también” somos la cola de Europa.

En el estado español sólo en Navarra y en las Baleares tienen una normativa que está estudiando su implantación, en la comunidad de Valencia se intentó pero la cobardía política venció a la iniciativa. En el 2.013 se hizo una prueba piloto en Cadaqués en la que se consiguió el 90% de recogida de los envases. Según l@s expert@s nos dicen que con este sistema dejaríamos de producir 30 millones de envases.

La normativa europea nos dice que deberíamos reciclar el 85% y si con el sistema SIG no lo estamos consiguiendo ¿no deberíamos cambiar de hábitos y de sistema? Es que no tenemos otra, los expert@s nos están diciendo que estamos viviendo en un sistema desbocado, nos dicen que a nivel mundial cada minuto estamos comprando/utilizando un millón de botellas de plástico, un millón de envases que los convertimos en basura contaminante.

¿QUÉ DICEN ECOEMBES Y LOS PRODUCTORES DE ENVASES?

Ecoembes dice que el sistema SDDR no es viable porque solamente incide en una parte del total de los residuos, es cierto, porque incide sobretodo en latas, botellas, briks, vidrio, en los envases en general, pero nosotros preguntamos, ¿si Ecoembes sólo recicla el 25%, esto no es parte del total? Cuando encima cobra para que haga el 100%. Ecoembes dice que con este sistema se “ahorra” menos emisiones de CO2, pero en este caso la cuestión no está en ahorrar sino en NO producir CO2, y esto se consigue porque los envases que se lleven a la tienda la gran mayoría estarán limpios por lo que facilitará más y mejor su posterior selección.

Los productores de envases dicen que este sistema “privatiza y mercantiliza el reciclaje” Precisamente esto es lo que hacen ellos, cuando crean una empresa propia, por cierto ¿no es mercantilizar el reciclaje cuando se da a una empresa casi 600 millones de €? si Ecoembes hiciera bien su trabajo reciclaría el 85/90% de los residuos, y si esto fuera así ¿quien tendría argumentos para reivindicar otro sistema, si en esa reivindicación se pide ese mismo porcentaje de reciclaje?

P D Fuente Merca2 2020-V-16 Lorenzo Ramírez

Según los registros contables de Ecoembes durante el ejercicio del 2.017 (último año en que los datos son públicos) los 10 miembros de la alta dirección de la compañía tuvieron una remuneración de 1,66 millones de € esto supone que cada miembro cobró 166.000 € anuales, casi el doble del salario del presidente del gobierno español Pedro Sánchez.

Para terminar, este salario lo tienen para recoger, clasificar y reciclar el contenido del contenedor amarillo, pero si el 75% de este acaba en vertederos, incinerados o en la naturaleza, (en los ríos, montes, mares etc. ¿qué nos queda hacer?

Piter Encinas e Igor Urizar, miembros del grupo Ekologistak Martxan de Arrasate

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