De nuevo bajan los ríos marrones después de las fuertes lluvias, como consecuencia directa de las
matarrasas de pinares y eucaliptales. Sin árboles que sujeten el suelo, con pistas que generan desmontes… lo estamos haciendo mal, muy mal, no se cuida la tierra, ni se regeneran los bosques… así baja uno de los arroyos de Lemoiz (izda) y al llegar al mar (dcha).
Hay que insistir en la recuperación del bosque autóctono, protector de la tierra y de la vida!