Ekologistak Martxan denuncia el grave destrozo de las obras del TAV en la cueva de Lezetxiki, lugar declarado ‘Bien Cultural de Protección Especial’

  • Ante las imágenes facilitadas por un grupo de espeleólogos, Ekologistak Martxan denuncia el “enorme destrozo” de la cueva de Lezetxiki causado por las obras del TAV
  • Consideran que el Estudio de Impacto Ambiental del TAV presentado por ADIF, y aprobado por el Gobierno Vasco, es deficiente

Ekologistak Martxan, ante las fotografías publicadas recientemente por un grupo de espeleólogos, denuncia “la aberración de lo sucedido en las galerías inferiores de la cueva de Lezetxiki, que se han visto atravesadas por el túnel del TAV”. Estas obras, además, han provocado desprendimientos y la obstrucción de alguna galería con lo que “se ha dañado el frágil ecosistema subterráneo de la cueva”.

La organización ecologista destaca que “Lezetxiki fue declarada por el Gobierno Vasco como “Bien Cultural de Protección Especial” por albergar yacimientos arqueológicos y paleontológicos en algunas de sus galerías, por lo que nunca debería haberse visto dañada por las obras del TAV”. Para los ecologistas, lo sucedido muestra también la “deficiencia del Estudio de Impacto Ambiental del Proyecto del TAV presentado por ADIF y la desidia del Gobierno Vasco que con su Declaración de Impacto Ambiental positiva dió visto bueno a ese EIA”.

Por otro lado, los ecologistas denuncian que, en nombre del desarrollo, este tipo de proyecto de transporte ha generado en nuestra sociedad “un enorme derroche de dinero público, así como injusticias, desperdiciando las inversiones que podrían cubrir otras necesidades sociales como la sanidad, la educación, los cuidados…”. Por si eso no fuera poco, a lo largo de estos años, esta infraestructura ha sufrido muchos accidentes en todo su recorrido, con graves perjuicios para los trabajadores que trabajan en ella. 

Cabe destacar que este año se cumplen 30 años de la creación del movimiento AHTerik ez!, tres décadas durante las cuales diversos agentes sociales han dado a conocer el proyecto y sus consecuencias a través de mil charlas y cientos de protestas. Para estos colectivos, el proyecto del TAV es muestra de “imposición y autoritarismo, chocando con la autonomía de algunos de nuestros ayuntamientos”. 

Por todo ello, y ante el paso del túnel del TAV por la propia cueva de Lezetxiki, el grupo ecologista se plantea las siguientes preguntas: “¿Qué dicen nuestras autoridades? ¿Qué dicen nuestros cuidadores? ¿Quién cuidará de nuestro patrimonio?”. Desde los movimientos ecologistas tienen claro que “es hora de parar esta gigantesca obra, que todavía necesita grandes inversiones”. Al fin y al cabo, “el medio ambiente, la biodiversidad, el territorio y la economía nos lo agradecerán”.

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